En casa del herrero,...

Recientemente tras participar en una de las múltiples convocatorias que la revista Colors Magazine realiza a menudo. Entre las imágenes enviadas, y seleccionadas por la revista, se me coló una, con el conocido perfil proPhoto, que comentaba en anteriores artículos es más que recomendado su uso, ya que es el perfil que posee un espacio de color, o gamut más amplio, por lo que nos permite editar nuestras imágenes con una gran paleta de matices.

Sin embargo, como he insistido en otros artículos también, cuando enviamos imágenes a ciertos medios, como por ejemplo internet, hay que “convertir” nuestras imágenes a o otros espacios, como por ejemplo el universal sRGB.

Cuando se publica una imagen en una web, a menudo se usan asistentes para procesar las imágenes antes de su publicación. Uno de los procesos, o más bien consecuencias, es la perdida de perfiles o la re-asignación del estándard sRGB.

Cuando cambiamos del espacio proPhoto a sRGB, sin hacer una conversión previa, con casi toda seguridad va haber una grave alteración de los tonos de la imagen, y a menudo luminosidad.

Es conveniente por tanto, revisar estos detalles, sobretodo si tenemos la costumbre de trabajar con perfiles de color particulares.