Rótula panorámica casera

Al mismo tiempo que el 4:3 va dejando paso al 16:9, el mundo panorámico va consiguiendo adeptos en la fotografía digital. Esto es gracias, entre otras cosas, a lo asequible de las técnicas de ensamblaje de imágenes con aplicaciones de pago como PTGUI o gratuitas como Hugin

Uno de las primeros escollos en el mundo panorámico es la rotación de la cámara sobre el trípode, con el fin de minimizar los errores de paralaje al unir nuestra serie de imágenes en una sola.

Los errores de paralaje están motivados por la rotación de la cámara sobre el habitual plano focal, sin embargo para minimizar estos errores la cámara debe rotar sobre lo que se conoce comúnmente, pero erróneamente como “eje nodal”, cuando se debería hablar de punto de “no-paralaje” o “pupila de entrada”. El término eje nodal es tan común que incluso gran parte de los fabricantes de accesorios panorámicos siguen llamando a sus rótulas y accesorios por este término.

La ubicación del punto de no-paralaje en una óptica depende completamente del diseño de esta y sólo es posible calcularlo de forma empírica. La ubicación de este punto en nuestra óptica se puede hallar alineando el centro de nuestro objetivo con dos puntos separados una cierta distancia de forma que el segundo se esconda tras el primero. Al girar la cámara hacia la derecha o la izquierda, si esta se encuentra pivotando sobre el eje de no-paralaje ambos puntos o objetos se mostraran alineados, sin embargo si nos encontramos en la zona de paralaje, dichos objetos se verán descentrados uno respecto al otro.

Este fenómeno nos lleva a la necesidad de un nuevo juguetito: las rótulas nodales o rotulas panorámicas, unos artilugios un tanto caros para el rendimiento que se les suele extraer.

Las rótulas panorámicas están pensadas para sujetar la cámara de forma que el eje nodal coincida con el eje de rotación de la cabeza del trípode.

Fabricar una rotula panorámica es francamente sencillo. Yo he partido de un plato de flash en “L” que ya tenía por casa. Estos platos (flash bracket) se pueden conseguir a precios muy económicos por ebay. Si nos hacemos con uno de estos solo tenemos que conseguir una pletina de aluminio perforada para poder ubicar nuestra cámara correctemente respecto a su eje nodal.

Como no pude encontrar una pletina de aluminio lo suficientemente robusta, adquirí una de 2mm de grosor en una tienda de bricolaje. La corté en tres partes que adherí con pegamento epóxico. Finalmente realicé unos agujeros con un taladro, agujeros que deben coincidir con las posiciones de los puntos de no-paralaje, que rematé con una rosca, así los tornillos se enroscan directamente a mi pletina y me ahorro andar con tuercas.

Una alternativa a esta pieza, es un recurrido truco, que parte igualmente del plato de flash en “L”  y se basa en inclinar la cabeza del trípode hacia atrás y posteriormente corregir la inclinación de la cámara sobre el plato con ayuda de un nivel. De esta forma es posible crear una rotación sobre el eje de no-paralaje o “nodal”. De esta forma podemos superar algunas situaciones, pero nos veremos limitadas en otras.